Los lineales de los supermercados están abarrotados de huevos con diferentes alusiones a su origen, y no siempre son fáciles de interpretar. “Huevos de gallinas criadas en suelo", "gallinas criadas en libertad", "gallinas felices", "camperos"... son algunas de las más habituales. ¿Significa que esos huevos sean ecológicos? La respuesta es no. O, al menos, no necesariamente.
En primer lugar, debemos saber que la Unión Europea, con el fin de proteger al consumidor, establece las normas de comercialización de los huevos producidos en Europa. Así, para obtener el sello de ecológico, las gallinas deben cumplir ciertos requisitos, tales como: vivir en corrales al aire libre, ser alimentadas con pienso de agricultura ecológica, tener ocho horas de sueño de oscuridad total, disponer de cuatro metros cuadrados de terreno por cada una, etcétera. Además, en el campo donde vivan no se puede usar abonos químicos ni plaguicidas.
Evidentemente, estas condiciones no resultan baratas de cumplir. Por ello, el huevo ecológico tiene un precio más elevado que otros. A cambio, disfrutaremos de un producto libre de agentes químicos y pleno de sabor y textura. Porque cuando la gallina vive con menos estrés y una alimentación natural, se nota.
¿Cómo podemos identificar un huevo ecológico?
No es difícil en absoluto. La Unión Europea obliga a identificar la procedencia de los huevos en función de un código numérico que se imprime en cada uno de ellos, en su cáscara.
Si los huevos llevan un 0, significa que es ecológico, y que la gallina disfruta de unas condiciones de vida explicadas anteriormente: libertad total, alimentación ecológica, suelos libres de pesticidas...
Si llevan un 1, estamos ante un huevo de gallina campera, que viven en el suelo y tienen posibilidad de entrar y salir al corral, pero con una alimentación diferente a la gallina ecológica.
Si la cáscara está marcada con un 2, se trata de gallinas que, sí, viven en el suelo, pero no salen al aire libre y, habitualmente, deben compartir su espacio con muchas otras aves por lo que su movimiento se reduce de forma importante.
Si nos encontramos con un 3 impreso en el huevo, significa que la gallina vive encerrada en una jaula, sin movimiento, sin pisar suelo, con un nivel de estrés elevado.
Ahora que ya sabes cómo identificar los huevos, en tu próxima compra ya sabes dónde fijarte y qué significa esa información.
Los huevos de Rosalinda, ecológicos del CPAER
En La Rioja, concretamente en el pueblo de Arrúbal, encontramos al productor de huevos ecológicos Los huevos de Rosalinda, que es miembro del CPAER. Su origen data del año 2013 y, actualmente, cuenta con 2000 gallinas, cuyos huevos se distribuyen en La Rioja, Madrid y País Vasco. Dispone de dos naves y 10.000 metros cuadrados de patios.
El Consejo de la Producción Agraria Ecológica de La Rioja es la Autoridad de Control y Certificación de la Producción Ecológica en La Rioja, y órgano de gestión de la misma.
Entre sus funciones, además destacan la representación, comunicación y promoción de la producción agroalimentaria ecológica de La Rioja, de sus productos ecológicos y de sus métodos de producción.
Actualmente, más de 400 productores riojanos están adscritos al CPAER y trabajan para ofrecerte alimentos ricos, saludables, de aquí y que cuidan nuestro planeta.
Consumir productos ecológicos es bueno para ti, y para todos.