Los consumidores habituales de productos ecológicos sabemos que no es oro todo lo que reluce. Por desgracia, en no pocas ocasiones a todas y todos nos han intentado colar como ecológico productos que en realidad no lo son. Pero existe una manera infalible de que esto no vuelva a ocurrir: buscar la Eurohoja, el logotipo europeo que certifica a un producto como ecológico. Por tanto, solo los productos que lleven este logotipo pueden incluir la tan ansiada mención de Ecológico, Eco, Biológico, Bio u Orgánico.
La Eurohoja ofrece una identidad visual coherente a los productos ecológicos de la Unión Europea. Facilita que los consumidores identifiquen los productos ecológicos y que los agricultores puedan comercializarlos en todos los países de la UE. Por ello, debe figurar de manera obligatoria en los alimentos ecológicos producidos, elaborados y/o etiquetados en los países miembros de la Unión Europea, garantizando que, como mínimo, un 95 por ciento de sus ingredientes han sido elaborados de manera ecológica y que el 5% restante cumple unas condiciones estrictas (como, por ejemplo, que el mismo ingrediente no pueda estar presente en forma ecológica y en forma no ecológica).
Para conseguir esta certificación de la UE, los productores y fabricantes deben obtenerla mediante un organismo de control autorizado que compruebe y garantice que están cumpliendo con los requisitos enumerados en la normativa europea mediante controles e inspecciones anuales. En el caso de España, será el Organismo dependiente de la Comunidad Autónoma el responsable de realizarlos para asegurar que el alimento cumple con los requisitos europeos para la producción, transformación, transporte y almacenamiento del alimento ecológico y certificarlo como tal. Solo así, podrán lucir este sello en su etiquetado.
Visualmente, este logotipo de color verde simboliza una hoja que ha sido formada por las doce estrellas blancas de la Unión Europea. Además, en el mismo campo visual del logo debe ir el código de la autoridad de control que certifica el producto y el lugar de producción de la materia prima del producto:
• Agricultura UE, si todos los ingredientes de origen agrario son de la Unión Europea.
• Agricultura UE/no UE, cuando al menos el 2% de los ingredientes de origen agrario sean de fuera de la Unión Europea.
• Agricultura no UE, cuando todos los ingredientes son de fuera de la Unión Europea.
Además de la Eurohoja y de estas menciones, de manera opcional, también puede figurar en el etiquetado el sello del CPAER.
Por último, recordar que el logotipo debe mostrarse de acuerdo con unas normas estrictas:
• Debe medir entre 13,5 y 9 mm. Si el envase es demasiado pequeño para esas medidas, se permite que mida entre 9 mm y 6 mm.
• Debe ser de color verde y blanco estándar, salvo en caso de impresión monocolor.
• No puede estilizarse (por ejemplo, haciendo que el fondo sea transparente o añadiendo efectos en 3D).